lunes, 9 de mayo de 2011

La cruda "monetaria"

“Compadre, ¿Cuánto dinero le quedo?, saque la barbacoa” .

Primeras palabras que escuche en el teléfono un domingo a las 4 de la tarde acostado en una cama que no era la mía y una compañera de laburo en esta misma.



Busco mis gafas, busco mis pantalones y encuentro mi cartera para hallar dentro de ella $800.00, he ahí cuando conocí algo a lo que llamo “cruda monetaria”.



Flashback inmediato a día sábado, hora de salida del laburo, emocionado todo el escuadrón por ser quincena y día en el cual los bonos son entregados. Rápidamente se hace el plan para realizar el festejo como cada quincena manda aprovechando el dinero extra ganado con la paciencia de nuestro ser al soportar a tremendos mensos llamados clientes que no saben leer sus cuentas. Siguiente parada, el buen señor cajero que ahora agradezco pueda tener un limite de retiro, de no ser así, hubiera sacado mas de lo que me permitió esa noche.


9:00 pm, auto estacionado, el team ya con ganas de ingerir y celebrar en un lugar cerca de Coyoacán el cual me recuerda que todos tenemos dos lados anímicos diferentes. Siguiente paso, elegir estar con la banda rockera o la banda electrosa. Aquí la decisión fue tomada por una de las acompañantes de batallas contra el alcohol. Decisión: banda electrosa.



Ya sentados los 4 decidimos por ordenar la primera ronda, cervezas.  Cabe mencionar que el precio de una simple y sola cerveza varia de acuerdo al lugar  donde demográficamente te encuentres bebiendo. Ronda que duro aproximadamente media hora ya que la misión era alargar la noche, evitar empedarse y volver temprano a casa evitando al otro día la cruda dominguera. Misión no cumplida.



Como toda peda común y normal los primeros drinks son de relax, criticar a los clientes, mandar a la chingada a los superiores. Después de unas cuantas rondas las cosas suben de tono y empiezan las bromas, los chistes y esas pequeñas indirectas que le sueles tirar a tu co-worker sin intención precisa…todo esto en alrededor de 2 horas.



A la 1:00am ya nos encontrábamos todos de dadivosos peleando por ser el que invitara la ronda siguiente, intenseando ya en platicas sobre los sentimentalismos de oficina y el clásico “¿Quién te gusta del equipo?” a sabiendas de la respuesta solo para sentir suelo mas firme antes de tirar la piedra y levantar la mano de culpable. He aquí el pecador que arrojó la piedra para poder pecar juntos.



2:00am es la hora aproximada en la que estamos eufóricos bailando como si estuviéramos en un trip de esas drogas que no consumimos (by the way) pero que la gente consume y parece verse muy feliz cuando en realidad los demás (sobrios o no intoxicados) se dan cuenta que su baile esta del asco y solo hacen cara de “wow, these dudes are awesome”.



Después de pasar la euforia colectiva, volvemos al estado pacifico para ahora ya no pelear quien pagara las rondas siguientes, sino para nominar al siguiente que debe pagarlas, ya para esa hora uno debe verse en la necesidad de cerrar una cámara para enfocar bien y no perder el suelo.



No recuerdo la hora en la que salimos del lugar, la cuenta de cuanto fue ni aquellos detalles efímeros. Supongo que la hora de salida fue de acuerdo a los reglamentos que impone la delegación. De ahí en adelante solo recuerdo tener pequeños fragmentos de recuerdos: manejar, parada en una tienda por mas alcohol, cena en puestito raro de tacos con mas briagos, dejar a 2 de la tripulación, cama. Estaría de lujo poder decir que termine teniendo sexo o algo así, pero la verdad es que no lo recuerdo, así que no hare ninguna conclusión, tal vez solo no me dejaron ir a mi casa y prefirieron darme asilo… who knows?


No hay comentarios:

Publicar un comentario